GRAN CANARIA POR LA DOBLE AUTONOMÍA
Desde el siglo XVIII, las oligarquías caciquiles y políticas santacruceras, han puesto en práctica todas las trampas y artimañas posibles, para negar el pan, la sal y cualquier atisbo de prosperidad al resto de todas las Islas en general y a Gran Canaria en particular, con el único fin, cueste lo que cueste, de ser la capital única de Canarias. Santa Cruz de Tenerife, la más poblada, la más rica, la de mayor cultura e intelectualidad, (Dulce Xerach Pérez), ¿de veras?, venga ya, aunque para ello tenga que falsear, manipular y solapar documentos mercantiles, censos electorales, censos de población, listas de espera sanitarias y cualquier documento que vaya en contra de sus intereses, también cabe decir, la más insolidaria, la más envidiosa y la más rastrera.
Apuntes de nuestra historia:
1813-1814-1822-1823, centralismo interno en la capitalidad provisional, 1833-1927 o definitiva de la provincia de Canarias, la entronización de un modelo administrativo centralizador que benefició sobremanera a Santa Cruz de Tenerife, frente al resto de las otras Islas y en especial a Gran Canaria, la más rica y poblada del Archipielago. Los apaños del comandante general y jefe político, Pedro Rodríguez de la Buria, dieron la capitalidad de facto a Santa Cruz de Tenerife.
1822, Las Cortes otorgan por segunda vez la capitalidad a Santa Cruz de Tenerife, sin que Gran Canaria estuviera representada.
1834, la población de Las Palmas fue siempre mayor que la de Santa Cruz, desde la capital se falseó sistemáticamente esta diferencia, como la ocultación fiscal sobre pagos tributarios. Gran Canaria es victima de múltiples saqueos, autorizados por el jefe político y la Diputación santacrucera. Desde Santa Cruz se dispuso la desforestación de Gran Canaria para surtir de maderas sus almacenes.
1836, el mecanismo centralizador interno ubicado en Santa Cruz de Tenerife, propiciaron la apuesta divisionista durante más de noventa años.
1840-1843-1854 y 1868, las juntas establecidas en Las Palmas, acordaron la formación de una provincia independiente con las islas orientales, Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote. El comandante general Antonio Moreno, previó atacar militarmente a Las Palmas, cierre de las comunicaciones navales, desabastecimiento de Gran Canaria. Expolio de los honorarios de los maestros titulares de primeras letras.
1846, como en anteriores ocasiones, los políticos al servicio de Santa Cruz, adulteraron los censos electorales.
1851, insolidaridad santacrucera ante la epidemia de cólera en Gran Canaria, el prolongado bloqueo y el desabastecimiento de fármacos y alimentos, duró nueve meses, de Junio de 1851 a Febrero de 1852, alcanzando también a Lanzarote y Fuerteventura.
1852, Real Decreto de Bravo y Murillo, régimen de franquicia, con bastante antelación la burguesía santacrucera radicó en que Las Palmas renunciase a cualquier rol comercial y portuario hacia el exterior, Real Decreto, implantando dos distritos administrativos de rango similar, (Diputación del Consejo provincial y Junta de Sanidad), duró solo un bienio, por la oposición de las autoridades santacruceras.
Los oligarcas y políticos santacruceros, obstaculizaron cuanto pudieron el desarrollo de las industrias de Gran Canaria. La burocracia chicharrera hizo cuanto pudo para frenar la expansión urbana de Las Palmas de Gran Canaria a finales del siglo XIX. Los hospitales, casas de maternidad, cunas de expósitos, casa de huérfanos, casa de desamparados, etc., las cantidades asignadas desde Santa Cruz, eran irrisorias para su correcto funcionamiento y atención de los pacientes, siendo Gran Canaria quien más tributos aportaba, en el resto de las Islas la desatención era completa. Los escasos medios para atender la sanidad, la pobreza, el desarrollo de las enseñanzas medias y superiores de forma desigual, privilegiando a los santacruceros.
1927, división provincial, llegó la prosperidad y la calma para las Islas de Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote, pese a la oposición manipuladora de los oligarcas y políticos santacruceros.
1987-1989, presidente autonómico, Fernando Fernández Martín, de nuevo comenzó el desmantelamiento de la provincia de Las Palmas en general y de Gran Canaria en particular, con la complicidad poco honesta, de algunos políticos de la provincia de Las Palmas.
1988, los grancanarios salieron a la calle en multitudinaria manifestación para reclamar una Universidad para Las Palmas de Gran Canaria, Santa Cruz de Tenerife haciendo gala de su gran nivel cultural e intelectualidad con sus oligarcas y políticos al frente, se manifestaron en contra de su creación, el tinglado se les venía a bajo, es hasta la fecha, el único pueblo del mundo que se ha opuesto a que otros puedan tener cultura.
1989, creación de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, pese a la oposición cobarde santacrucera.
2007, presidente autonómico, Paulino Rivero Baute, el desmantelamiento de Gran Canaria es vergonzoso, público y notorio, con el consentimiento de la mayoría de la clase política de Las Palmas, Paulino Rivero, desgraciadamente para Canarias, sigue haciendo oposiciones para conseguir ser, el peeor presidente del Gobierno Autonómico de Canarias.
En un artículo de opinión publicado en un periodico de Gran Canaria por el economista Don. Juan Arencibia Rocha, decia, que Gran Canaria seguirá siendo por muchos años el verdadero motor económico del Archipielago. A pesar de la manipulación informativa que vierten muchos políticos, e incluso, desde el Gobierno de Canarias, afines y controlados por C.C. - A.T.I. . Santa Cruz quiere conseguir al precio que sea, la capital única. Gran Canaria, la más poblada, la más rica, el motor económico del Archipiélago, la isla que más tributos paga y la que menos presupuesto recibe del Gobierno Autónomo, ¿de Tenerife?, que con su cicatería y envidia enfermiza hacia Gran Canaria, pone en alto riesgo la economía y el bienestar de todo el pueblo canario.
Por estas y por muchas más razones publicadas y denunciadas en la mayoría de los medios de comunicación, GRAN CANARIA DICE SI, A LA DOBLE AUTONOMÍA.
Autores consultados: Agustín Millares Cantero, Chil y Naranjo, Millares Torres, Museo Canario
José Antonio del Rosario
