domingo, 30 de agosto de 2015

¿QUÉ HACER, Sr. ALCALDE?



¿QUÉ HACER, Sr. ALCALDE?


Carta abierta a Don Augusto Hidalgo Macario
Excelentísimo Sr. Alcalde del Municipio de Las Palmas de Gran Canaria


     Con un criterio de apariencia simplista se habla de los derechos ciudadanos en cuanto a su seguridad, el derecho al descanso, el respeto público y comunitario, el civismo, la educación, etc, etc….

     ¿Qué hacer, cuando los cargos electos y policía local hacen dejación del cumplimiento de normativas de seguridad ciudadana? ¿Debemos abandonar nuestros derechos y deberes constitucionales porque desde la administración municipal encargada de la seguridad ciudadana, fingen no escucharnos?

     Me explicaré: desde hace más de un año me dicen los vecinos de la calle Don Pedro Infinito en el espacio que ocupan las calles Tormento y Pepe Rey y calles adyacentes del barrio capitalino de schamann; venimos sufriendo y padeciendo escándalos, borracheras, peleas, cánticos y sobre todo lenguaje soez, meadas y cagadas propio de un incivismo galopante. Si les llamamos la atención, se nos cae encima una retahíla de insultos y amenazas (groserías que es menester no comentar), peor el remedio que la enfermedad.

     La corporación municipal anterior, tuvo la genial idea de quitar los bancos de la calle Don pedro Infinito esquina Tormento, con el mismo resultado actual. Ya nos cuesta bastante dinero a los contribuyentes el mobiliario público para prescindir de ellos, por una decisión arbitraria falta de objetividad.

     Los vecinos hemos llamado decenas de veces a la Policía Local, les hemos contado las incidencias del lugar (que desgraciadamente para nuestro municipio no sólo sucede en este barrio), que amable, educada y cordialmente nos han escuchado dándonos su parecer para la solución del problema. No siempre se presentan en el lugar de los hechos, y cuando hacen acto de presencia sólo median unas pocas palabras, la presentación de documentos de identificación y ojos que te vieron dir…… Quedándonos los vecinos en cuadro y con un paquete de mayores proporciones, pues los insultos y amenazas vuelven con mayores bríos.

     El día 25 de agosto del año en curso, una vez más los vecinos llaman a la Policía Local denunciando los incívicos hechos que es una constante diaria, amablemente les dijeron que presentaran denuncia por escrito en el Ayuntamiento o en el cuartel de la policía, pues ellos habían dado parte en numerosas ocasiones de las incívicas incidencias que se producen en el lugar. Ayer día 27 de agosto llamaron a la Policía Nacional, desaparecieron del lugar.

     La pregunta que se hace la mayoría de los ciudadanos de este Municipio es; ¿para qué sirve la Policía Local? Si cada vez que llamamos por incívicos comportamientos, por discotecas automovilísticas, caseras y locales comerciales con volumen a toda pastilla diurna y nocturnamente. Si llamamos por altercados peligrosos en hogares y lugares públicos, si siempre tenemos que presentar denuncia por escrito, ¿Cuándo nos solucionarán la inseguridad ciudadana que padece el municipio?

Tal como me lo contaron………

    La calle Don Pedro Infinito con próspero futuro y adecuada seguridad, por Iluminada decisión Política la mandaron hacer puñetas, desgraciadamente no sólo sucedió en este barrio.

LEY DE COORDINACIÓN DE POLICÍAS LOCALES

Ley 6/1997, de 4 de julio, de Coordinación de Policías Locales de Canarias (B.O.C. 91, de 16.7.1997; c.e. B.O.C. 94, de 23.7.1997) (1) (2)
Las policías locales, como unidades operativas de la Administración municipal, han estado tradicionalmente encargadas de la seguridad pública en sus respectivos municipios. En el ejercicio de las funciones propias del Cuerpo, se han caracterizado por el contacto directo con los ciudadanos de su término municipal, adecuando su actuación al interés general.

La policía local, como parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad ejerce, entre otras funciones, una parcela de la actividad pública encargada de la seguridad ciudadana, por lo que se hace indispensable que se mantengan criterios uniformes, en cuanto a su ámbito de actuación, conforme a lo establecido en el artículo 39 de la referida Ley Orgánica 2/1986, para lograr así establecer unos cauces de actuación general para la protección de los derechos y libertades públicas y el mantenimiento de la seguridad ciudadana.

Artículo 4.- Funciones.
1. La Policía Local es un Cuerpo de Seguridad dependiente de las corporaciones locales, cuya misión consiste en proteger el libre ejercicio de los derechos y libertades y garantizar el mantenimiento de la seguridad ciudadana, la convivencia y la calidad de vida de la colectividad, mediante el desempeño de las funciones atribuidas en la Ley Orgánica 2/1986, de 13 de marzo, de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y en el resto de la legislación aplicable.

Artículo 44. 2. Estarán obligados a participar, en el marco legal, en las acciones de Protección Civil vinculadas a situaciones de grave riesgo, catástrofe o calamidad pública y a la protección y socorro de personas y bienes en los casos en que dichas situaciones se produzcan.





José Antonio del Rosario





miércoles, 19 de agosto de 2015

SIN MEMORIA Y ALGO MÁS



SIN MEMORIA Y ALGO MÁS


     Todo lo que ellos quieren decirnos y para que en ellos creamos, se publica en los medios de comunicación pública y afines al poder. Las propuestas y veredas que quieren que escojamos para llevarnos a la gloria, son extremadamente graciosas y parecen comentadas y escritas para hombres y mujeres sin memoria, sin inteligencia y sin voluntad.

     Dicen desde hace unos pocos meses tratando de justificar la indefinida prolongación del estado de alarma que ellos mismos han creado, que “es necesario que “La Familia” en el Gobierno se defienda de sus enemigos". Y espera con expectación, no exenta de ansiedad, la llegada de las elecciones que la encarame una vez más en el machito del poder. ¿Esto es nuevo?, los enemigos los tiene dentro de su propia parentela, es más; ella es su propio enemigo.

     Si la memoria no me juega una trastada, la radicalizada-derecha en sus arengas emulando glorias pasadas, cobardemente intentan acojonar a la mayoría de los ciudadanos con el mismo discurso, “si gobiernan los otros” quitará las pensiones, bajará los salarios, trabajarán más horas, privatizará los servicios públicos y las empresas del Estado, los banqueros serán más ricos y los ricos más. ¿No es para cabrearse?

     Cada vez que llegan al machito, ponen en práctica el mismo sistema de metodología privilegiada de épocas pasadas. Han puesto al País en las manos de los especuladores y al Estado a los pies de los caballos. Para desgracia de este país, quedan bastantes ciudadanos que aunque nos les crean siguen confiando que la derecha-radical les sacará del atolladero donde ella misma los metió. Qué más da; que pasemos hambre, que no tengamos trabajo, casa, servicios sociales, educación y sanidad pública. Qué importa que no tengamos ni siquiera un cacho de tierra donde caernos muertos.

     Gobiernos o regímenes, que necesitan continuamente de los medios de comunicación para acojonar a los ciudadanos y defender sus gestiones de gobierno cuidadosamente calculadas para sus propios beneficios, echándoles la culpa de sus  cacicadas a sus enemigos. Una de dos: o que tienen muchos enemigos, en cuyo caso no merecen gobernar ni la vida que disfrutan, o que carecen de fuerzas morales, honradez y honorabilidad para defender gobiernos. No es justo que para defender un régimen o un Gobierno se perjudique cobardemente la vida de un País.

     Los moldes legislativos, jurídicos, políticos, sociosanitarios, educacional y cultural en los que se asienta una Democracia, han sido sustituidos por las nuevas formas derivadas de una democracia corrompida. El concepto del Orden democrático se ha subvertido en aras de la violencia.


     Entre el Gobierno y el país, es indudable que lo preferente es el país, pues el Gobierno solo existe para el país y no el país para el Gobierno. Es del todo ilógico que el país se sacrifique para un Gobierno, eso sería el catecismo en doctrinas dictatoriales, donde el estado de excepción es de indefinida prolongación. Por otro lado, el caso se agrava de manera particular, cuando el régimen decreta leyes y métodos excepcionales que emplea para evitar, callar o disimular la verdad. Un Gobierno que la verdad y la transparencia, la huye, la oculta o la disimula, precipita por si mismo su sentencia de muerte.


Cuando alguien asume un cargo público, debe considerarse a sí mismo como propiedad pública. Tomás Jefferson




José Antonio del Rosario


miércoles, 5 de agosto de 2015

INSENSATAS PRISAS



INSENSATAS PRISAS



      La política caciquil-radicalizada y sus afines, es decir  “La Familia”, con gritos desgarradores y actitud de tragedia más que burlesca, chulesca. Se encomienda la tarea de una mayor actividad, una decisión más audaz en sus determinaciones. Nos habla del cumplimiento del 93% de su programa electoral (?), y aconseja para su total compromiso, zanjar las dificultades que puedan surgir, con espíritu renovador, porque según dice el tristemente cómico diario de “La Familia”, ¡los hombres y mujeres de la izquierda radical no deberían volver al poder! Es cómico escuchar tremenda burrada.


      Parece normal que la Burguesía capitalista reclame al Gobierno que les representa una mayor actividad de lo convenido en solucionar los problemas que la economía tiene planteados como consecuencia del desorden político existente, es lógica esta actitud. La Burguesía capitalista se posiciona en adular al Gobierno Familiar con la esperanza de que el día de mañana le pague sus beneméritos servicios, y exige la aceleración de la obra de radicalización completa de imponer las desigualdades sociales.


      Son lógicas las prisas de los Gobiernos en aprobar leyes y presupuestos en los últimos meses de sus mandatos, tienen que hacer amarres duraderos para la Burguesía a la que sirven, esta es insaciable. Nada les importa que la caja quede vacía o con una deuda tremendamente desproporcionada que difícilmente puede ser justificada en el cuatrienio de sus mandatos. En todas las legislaturas sucede más de lo mismo, parece ser que la práctica habitual es favorecer con dinero público partidas presupuestarias a grandes empresas, multinacionales, lobbies familiares y particulares. Mientras, la empresa pública continúa en decadencia.


      Es de obligado interés para estos mulos políticos, que el dinero público vaya a parar a manos privadas para ir preparado su retiro dorado. Sabido es, que las grandes empresas tienen una deuda pendiente con la mayoría de los gobiernos, y ya se sabe, “favor por favor se paga” La rapiña en la caja pública es práctica cuasi-constante, y esta se disfraza con partida presupuestaria. Hombres y mujeres que conforman formaciones y partidos políticos, hablan de la Democracia como mejor sistema de gobierno y amparados en ella se lucran, empobrecen y arruinan Estados.


      Desgraciadamente y con mayor frecuencia, oímos y vemos en sesiones parlamentarias la vulgaridad del lenguaje político, insultos, amenazas, acusaciones, descalificaciones y gritos por doquier. Al final, todo es pura parafernalia. Diálogo entre besugos, vamos. El Congreso representa al pueblo, representación que también ostentan los Diputados, pues cada uno de ellos representa a la Nación. Las funciones que tienen las Cortes Generales son la aprobación de las leyes y de los Presupuestos generales del Estado, así como el control de la acción del Gobierno. O lo que es lo mismo; trabajar con leyes y mecanismos adecuados para la prosperidad de un pueblo. Claro está, que este proceder sería el adecuado y correcto cuando el pueblo está representado por cargos electos honorables, no que la sesión parlamentaria se convierta en una función de circo. Moda muy habitual que exhiben sus señorías para vergüenza de los pueblos.


      En la esfera política, las desigualdades sociales son perfectamente compatibles con la insensatez y la tiranía.


José Antonio del Rosario