sábado, 17 de octubre de 2020

LA DECADENCIA DE UN PAÍS

LA DECADENCIA DE UN PAÍS

 

      Desde el mandato presidencial de Adolfo Suárez (1976-1981), hasta el de Pedro Sánchez, ningún partido con representación en la cosa pública cumplió su programa electoral, y dudo que los cumplan en un futuro. Hace muuucho tiempo que hacer política al servicio de los ciudadanos y para el engrandecimiento del País quedó obsoleta.

      En el siglo XXI lo correcto es hacer políticas al servicio y beneficio de los Clanes Políticos-Familiares y Amigos varios, “hoy sería incorrecto y fuera de lugar, llamarles partidos a los que partidistamente colocan al resto de los ciudadanos en las más absolutas carencias” Los Clanes se afanan en hacer políticas de acoso y derribo para sentar sus posaderas en un sillón de poder, les importan un carajo que el País y la mayoría de sus ciudadanos continúen en una peligrosa decadencia.

       Para nuestra desgracia, esta nueva pandemia despertó nuestros sentidos haciéndonos comprender que este no es el camino para ir de la mano de los Clanes y sus devastadoras políticas. Para desgracia de los Clanes, la mayoría de los ciudadanos tenemos que movernos de nuestras aparentes cómodas vidas y exigir que nuestra Constitución se cumpla a rajatabla artículo por artículo ordenado por el Poder Judicial de Estado, independiente del Poder Político.

Es hora yá de conseguir un País libre de corrupción, de mafias políticas y empresariales. Es hora de luchar por nuestros derechos constitucionales tantas veces obviados con políticas interesadas.