Los
chicos del histórico Club de Balonmano BMW-Gáldar, tienen este fin de semana un
nuevo encuentro con su historia. Aquellos inquietos muchachos se empeñaron en
que la Ciudad de los Caballeros entrara por la puerta grande en el balonmano
canario y peninsular.
Esto comenzó en la década de los 70, este
grupo de chicos con la alegría y la inquietud de su juventud poco a poco fueron
formando su equipo, cuyos primeros entrenamientos se realizaron en la cancha de
la OJE de Santa María de Guía y los partidos se jugaban en el Instituto Antonio
Padrón.
En aquella época lo mismo se jugaba en
tierra, cemento o asfalto dándonos igual el resultado. En cada entrenamiento o
partido dejábamos por la cancha parte del cuero que envolvía nuestras finas
estructuras óseas (éramos finos como palillos de diente), y no se curaban a
tiempo los raspones y heridas del último combate para comenzar otro que nos
renovaban nuevas caspas y nuevo cuero. La Mercromina fue como agua bendita.
El aprendizaje fue largo y duro, pues
también tuvimos que aprender a volar y sobre todo a aterrizar. Y es que la
parte más importante y arriesgada de un vuelo es saber tomar tierra, ahí es
donde te la jugabas. Y no te digo nada del cuerpo a cuerpo, eso era como un
choque de tanques en donde siempre brilló el juego limpio y la caballerosidad
de los contendientes.
Nuestro
próximo abordaje será a las Huertas del Rey, programado para el sábado 8 de
julio a eso de las 2 de la tarde, pisco majomenos.
AVISO.
No se necesitan mapas ni cartas de navegación, no sea que caigan en manos del
enemigo.
José
Antonio del Rosario
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